El significado de una mariposa
25 de septiembre de 2022
"El latido de las mariposas depende de nuestra actitud" cumple cuatro años.
Hacer valoración del impacto que ha tenido en la sociedad nos llevaría a hablar de infinidad de variables. Muchas de ellas con un valor positivo y esperanzador. Quiero reflejar también la opinión de algunas personas que nos han dicho que representar la violencia con mariposas es banalizar la violencia y le restan "valor" o la "dulcifican". Yo soy de la opinión de que la violencia no se reduce ni elimina con más violencia. Esa opinión, a mi modo de ver, refleja un profundo desconocimiento sobre la violencia y una gran falta de empatía con las víctimas que la sufrimos, es principalmente la incapacidad de ponerse en "el lugar del otro".
Una mariposa tiene infinidad de significados y tú que lees esto tendrás el tuyo propio pero si conoces nuestro proyecto, el de todas las personas que se implican e identifican con él, entenderás que cada una de las mariposas que hacemos es un símbolo contra la violencia de género. No es un símbolo al azar, nace en 1960 con el asesinato de las hermanas Mirabal, a las que llaman "las mariposas", siendo este el origen del Día Internacional por la eliminación de la violencia hacia la mujer. Un símbolo que representa a cada víctima de esta violencia y que el hecho de compartirlo es mostrar la violencia al exterior, a toda la sociedad. Compartirla para que todos sepan que la violencia sigue existiendo y que en este momento hay miles de mujeres, niñas y niños que la están sufriendo.
En estos cuatro años he visto como una mariposa daba fuerza a una mujer víctima de violencia para enfrentarse a su día a día, a tener esperanza de que va a salir de donde está. Que esa mariposa de alguna manera le está ayudando y le ayuda a sacar esas fuerzas que ya cree no tener para escapar de su agresor.
Hacer valoración del impacto que ha tenido en la sociedad nos llevaría a hablar de infinidad de variables. Muchas de ellas con un valor positivo y esperanzador. Quiero reflejar también la opinión de algunas personas que nos han dicho que representar la violencia con mariposas es banalizar la violencia y le restan "valor" o la "dulcifican". Yo soy de la opinión de que la violencia no se reduce ni elimina con más violencia. Esa opinión, a mi modo de ver, refleja un profundo desconocimiento sobre la violencia y una gran falta de empatía con las víctimas que la sufrimos, es principalmente la incapacidad de ponerse en "el lugar del otro".
Una mariposa tiene infinidad de significados y tú que lees esto tendrás el tuyo propio pero si conoces nuestro proyecto, el de todas las personas que se implican e identifican con él, entenderás que cada una de las mariposas que hacemos es un símbolo contra la violencia de género. No es un símbolo al azar, nace en 1960 con el asesinato de las hermanas Mirabal, a las que llaman "las mariposas", siendo este el origen del Día Internacional por la eliminación de la violencia hacia la mujer. Un símbolo que representa a cada víctima de esta violencia y que el hecho de compartirlo es mostrar la violencia al exterior, a toda la sociedad. Compartirla para que todos sepan que la violencia sigue existiendo y que en este momento hay miles de mujeres, niñas y niños que la están sufriendo.
En estos cuatro años he visto como una mariposa daba fuerza a una mujer víctima de violencia para enfrentarse a su día a día, a tener esperanza de que va a salir de donde está. Que esa mariposa de alguna manera le está ayudando y le ayuda a sacar esas fuerzas que ya cree no tener para escapar de su agresor.
Otra mariposa refleja la actitud de una profesora, cómo es capaz de transmitir valores tales como el respeto, la empatía, el compañerismo.... y cómo sus alumnos entienden que la mariposa que hay en su centro, creada por los alumnos de toda el aula (o todo el centro), y que contiene la mariposa que el/ella mismo/a ha realizado, refleja que si colaboramos juntos el mundo va a ser mejor y el respeto es un paso hacia ese mundo.
He visto como se han unido personas de diferentes pueblos para realizar una misma acción, para trabajar en común por un mismo fin, cuando les costaba hacerlo y cómo ahora se mantiene esa unión porque una persona creyó en "el poder de una mariposa" y lo compartió.
He visto como cientos de personas se emocionan al conocer el origen del proyecto y las ganas de implicarse, desde el corazón, porque actos como el que dio origen a este proyecto, no se repitan.
Me emocionó ver como todos los asistentes al Congreso Coeduca, celebrado en Valencia, se levantaron aplaudiendo el trabajo que realizamos y lo lejos que están volando las mariposas con el proyecto. Y después siguieron volando en los distintos centros educativos donde esos profesores y profesoras trabajan.
Cada vez que nos llegan fotos de las mariposas que realizan los alumnos en los colegios o las que se realizan en cualquier otro espacio nos emociona. Y es porque estamos cumpliendo con un principio tan sencillo como es el de que, hacer algo por pequeño que sea siempre va a producir un cambio.
Estamos orgullosas de haber generado ese cambio y vamos a seguir dando esperanza a toda persona que confíe en que el mundo puede ser mejor con la suma de mucho pequeños actos.
Yo misma muchos días me he levantado porque las mariposas me dan el impulso para hacerlo. Hoy no es un día de celebración a pesar de que sea nuestro cumpleaños, hoy es el día en que dos niñas, Nerea y Martina, perdieron la vida y cada una de las mariposas que vuelan transmitiendo valores como el respeto y la igualdad las representan a ellas y a todas las víctimas de la violencia de género. Porque no son solo unas mariposas, es la actitud de miles de personas que están detrás de esas mariposas. Que confían en que la unión de pequeños actos de buenos tratos nos llevará a una sociedad mejor.
Es triste ver a personas que no entienden el significado de la mariposa, porque refleja una falta de empatía absoluta, que se aprende desde pequeños a través de los valores que nos enseña nuestra familia y quienes nos rodean. Transformar este aprendizaje una vez que somos adultos es muy complicado, pero no imposible. Por eso, vamos a continuar ayudando a volar a las mariposas, para que no se deje de escuchar la voz de ninguna de las víctimas. Porque es a ellas a quienes tenemos que proteger por muy escondida que esté la violencia que sufren tras la "normalización de actos violentos" que hemos creado en la "sociedad desarrollada".
Si queremos una sociedad de buenos tratos, no miremos hacia otro lado. El ejemplo es la mejor educación, ahí es donde los pequeños actos cambian el mundo.